Mi 16 QH, por Vidal Cereceda

Sinceramente no pensaba escribir mi crónica de mi decimosexta QH, leyendo las de Dani Pata-negra y/o el Mallorquín no se puede añadir mucho más. Ha sido la más dura QH que he vivido, más que la del calor de 1998 o 2002 por Piedra San Martín y Santa Cilia (te acuerdas Rafita????).

Pero hoy primero de julio he estado con Santiago (Las Gaunas) y hablando de la bici y del foro, me he animado a escribir una pequeña crónica.

Yo esta vez dormí bastante bien, y estuve en la habitación de Emilio. Si que te despiertas varias veces y tienes la sensación de no haber descansado. Pero supongo que dormí algo. Jejejejej. También he de decir que yo no romqué y no hice otros ruidos  “groseros”, como denuncia Emilio.

El desayuno muy bueno, el viaje hasta Sabi un poco largo y los preparativos de salida muy bien. Al final acerté en coger un ligero chubasquero que fue insuficiente pero algo haría, no???.

No es excusa, ya que estoy contento y orgulloso de mi tiempo (7.35 h), como digo no me gusta justificarme, pero de salida me vi sin patas y la gente iba para adelante y yo no podía seguir esas ruedas. Pienso y hablando con gente lo he corroborado, que la Iratí está demasiado cercana a la QH y no recuperé mi organismo de una prueba tan dura. Amén de que este año la Iratí estuvo pasada por agua.

Digo esto porque cuando salimos a la carretera en dirección a Jaca ya no se veia la cabeza, otros años veia a los primeros. Por esto decidí coger un ritmo adecuado. Mis pulsaciones eran buenas (145/150) pero mis patas no iban.

Pasado Villanua el aspecto era más que amenazador, y enseguida empezó a llover. Me subi los mangitos que estaban en mis muñecas y deje el chubasquero para la bajada. En Canfranc estación la realidad estaba ahí, y la cosa fue empeorando. Veia bajar más ciclistas que nunca, a dos kms. de la frontera me vio Riojitas que bajaba (dijo …. ehh lobo, ehh Vidal, que me retiro, suerte¡¡¡¡).  Entonces comprendi la situación.

Hacer la cumbre fue desalentador: frio, lluvia intensa, niebla densa, etc… Cogí periodicos y me puse el chubasquero y para abajo. Pense  basandome en el “mero deseo” que la climatología mejoraría a medida que bajaramos. Pensé son la 9 de la mañana y estamos a 1600 mtros y esto puede ocurrir.

La bajada peligrosa e insegura y curiosamente con menos percances que nunca. Peligrosa por el agua e insegura por nuestras manos agarrotadas.

La bajada que otros años es de menos de 50 minutos este año fue de 63 minutos.

Al llegar al plano e intentar pedalear la sensación era de “impotencia”, por ello decido comer algo y preparar la subida. Al llegar a M Blanque das pedales y parece salir el sol, me quito el chubaquero y al poco me arrepiento, vuelve a llover con intensidad.

Al llegar arriba otra vez a ponerme el chubasquero y agarrar el manillar con fuerza para bajar, me encuentro ahí con Enrique (el Indio) de Lerma, otro veterano. Intento hacer peña con él, pero me anima a seguir solo, el iba mal y es un tio bragao.  Esto a la vez me motiva y me desanima. Pero es mejor no pensar, paso el avituallamiento y al empezar a bajar alguien del público nos llama “gudaris” (lo mejor de la prueba es la afición y sobre todas la del Pais Vasco).

Al Portalet llegue bien con mucho ánimo. Ya vi que mi intención de bajar de 7 h. estaba fuera de lugar y bueno pensé en 7.30 h. Otros años en Portalet me adelantaba mucha gente y este año fue distinto, yo adelantaba y había gente que cogía mi rueda, también me adelantaba gente. A mitad de Portalet me tomé un gel (Smart) que me dio Fumetas y me fue fenomenal. Solo paré a mear en mitad del puerto.

El final de Portalet es un cúmulo de sensaciones, casi afloran lagrimas en los ojos y sonries a la gente agradecido por su animo. Este año había menos que nunca en Portalet por eso agradeces más su presencia y calor.

En este punto al iniciar el descenso estaba muy desanimado ya, pensaba en la Hoz con agua … Pero de repente a la altura de Sallent el suelo apareció seco, dije “bendito sea Dios” y me renovó el animo. Hasta me quité el chubasquero en la bajada de Hoz.

El resto fue bien, la bajada sin agua y con menos frio. Había en Hoz mucho público (más que nunca) y también te emociona llegar a la Hoz.

Al llegar a Sabi casi que no te lo crees, lo he pasado tan tan mal. Y ya empiezas a dar todo por bueno. Al poco de estár allí y recibir el calor y atenciones de Dani, de Sergio y de otros, de comer pasta y beber unas cervezas, empiezas a remontar y a ver todo fuera de ese especie de pesadilla que fue parte de la QH 2010.

Dar la enhorabuena a todos (Anabel, Sergio, Dani, Emilio, Rafita, Fer, Fer Manero, Fiti, Tomey, Perico, Cudi, Guti, Cuerpo-Bonito) incluídos los que han sabido retirarse (Angelito, Manolo o Eugenio). El Oscar ha tenido suerte con la excusa de la hernia.

La QH es para mi un reto donde la cabeza manda sobre el físico y este año más que nunca. Aquí no hay vencedores ni vencidos, a veces es más difícil retirarse y si se hace es una victoria.

Y yo si que tengo intención de volver.

Vi-ker (vidal cereceda)